14 diciembre 2005

Abuelito dime tú


Meßkirch, Baden (Alemania) – Diversas fuentes extra-oficiales estarían con-firmando una última entrevista que Heidegger otorgó en febrero de 1976, meses antes de su muerte. La misma habría dejado anonadado al joven admirador: Jean Buchónfret, que ofició de inter-locutor y que por reverencia mantuvo el silencio todo este tiempo. En ella, el filósofo alemán aclara que después de la guerra, más que luchar contra los fantasmas de su pasado: “El informe de Casper devela una amistad muy poco amigable”, tuvo que luchar contra las malas interpretaciones de su Sein und Zeit, pero principalmente tuvo que combatir la insistencia de músicos de heavy metal que solicitaban su término Dasein para bautizar a sus bandas. Además, el pensador alemán quiso aclarar que este último debe leerse Da Zen, el ahí del Zen, y no del ser. Quizás debido a su intercambio con la escuela de Tokio, especula el entrevistador. El movimiento hacia el misticismo en la evolución del pensamiento heideggeriano es evidente e incluso fue denunciado en su momento, por Sartre. “Heidegger est un vieux con délirant” (Heidegger es un místico), pero estas polémicas nuevas declaraciones nos dejan sin palabras. Sabemos que “el mundo mundea”, aunque a Carnap no le guste, y sí, "el lenguaje se va de fiesta", y entonces la nada nadea en su anonadamiento y “lo que desiste se aclara como aquello que tiene carácter de nada. Y eso puede expresarse mediante el «no». Pero la «nada» no surge en ningún caso del decir-no de la negación. Todo «no» que no se interprete erróneamente como un insistir obstinado de la fuerza impositiva de la subjetividad, sino que siga siendo un «no» de la ex-sistencia que deja ser, está respondiendo a la llamada del desistir surgido en el claro. Todo «no» es únicamente la afirmación del no de la nada. Toda afirmación reposa sobre un reconocimiento, el cual deja que venga a él aquello hacia lo que él va...” Y no sigo citando para no des-ocultar lo bien que vendría una develadora formalización lógica.
El ex – rector de Friburgo señala también otra confusión común, esta vez respecto a su protagonismo en su filosofía. “Yo no soy el secretario del ser, como sugerirá Sloterdijk para hacerse famoso, sino el nieto del ser. Es en el acontecimiento (Ereignis) del ser que él me revela: Tú eres Heidi-gger © y sobre ti construiré el post-estructuralismo francés.” Y continúa: "Mi actitud como pastor del ser (Hüter des Seins) debe ser la de una seta (Ascesis), a la escucha atenta del envio de sentido del ser. Es el habla que habla en el claro del bosque (Lichtung) y desde mi apertura al ser, sólo queda invocarlo en un austero cántico: Abuelito, dime tú..."
Ampliaremos.
© copyright J.B. y S.K.

3 Comments:

Anonymous Anónimo said...

Caramba!

Atte.

jueves, diciembre 15, 2005  
Anonymous Anónimo said...

Se podría ineferir que ese periodista Buchónblabla es ud. No revela mas que una pueril forma de demostrar ingenio, contando una - historia? - con el objeto de camuflar su egoreposado sobre escaso conocimiento.
La utilizacion de la referencia al grado academico del "investigado" no es para no repetir su nombre en la gacetilla sino para remarcar que retuvo ese dato, intrascendente en la cuestion,con el objeto de lucirse.
Que todo culmine con una referencia a Heidi, como emblema de "tengo algo de humor frívolo pero Heidi es ¨cool¨" no creo que arroje luz sobre ninguno de los temas abordados.
El estructuralismo frances dudo que haya tomado como piedra fundamental a Heidegger por el grado de parentesco filial con el ser.
Un saludo y siga buscando que va a ir saliendo de a poco

miércoles, diciembre 21, 2005  
Blogger G said...

Borsatto,¿realmente necesita que se le explique un chiste?
Respecto a la influencia de Heidegger en el postestructuralismo francés, la misma ha sido reconocida expresamente tanto por Derrida como por Foucault. El antihumanismo francés ve en ella una alternativa al pensamiento sujetivista. Le voy a pedir que en lo sucesivo fundamente sus observaciones.

miércoles, diciembre 21, 2005  

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